Domaine Weinbach es una de las tres bodegas con mayor prestigio en Alsacia. Sus vinos son reconocidos mundialmente por su extraordinaria calidad. Collette Faller y sus hijas Catherine y Laurence son las propietarias de 26 hectáreas repartidas entre los diferentes Crus del Valle de Kaysersberg. Practican una viticultura biodinámica y ecológica. Tienen plantadas las variedades riesling, gewürztraminer, pinot gris, sylvaner, pinot blanc, muscat, chasselas y pinot noir. Las vendimias se realizan a mano y, cuando la añada propicia el desarrollo de la botrytis, las uvas se recogen entrado el mes de noviembre.
La existencia de una gran diversidad geológica –típica de Alsacia– combina suelos de todo tipo –arcillas, rocas calizas, graníticas, areniscas, arenas y limos–, dando lugar a una gran variedad de terroirs con gran personalidad, y en el caso de los Grand Cru de forma excepcional. Las fermentaciones se desarrollan en viejos fudres de roble y algunas cuvées dulces tardan casi un año en finalizar. Para mantener la integridad y expresividad del vino se embotella sin filtrar ni pasar por frío. Siguiendo la filosofía de mínima intervención en el proceso de elaboración de todos los vinos, desde los genéricos hasta los más reputados, todos exhiben una gran elegancia y finura.