Para entender la extraordinaria trascendencia de la añada 2007 no hay que olvidar la incidencia física, tanto de la escasez de lluvias como de las carencias arrastradas desde el año anterior. Estos antecedentes, unidos a uno de los veranos más secos y sobre todo más suaves en décadas, proporcionaron unos rendimientos moderados y vivaces. La exquisita sustancia del mosto y la acidez mantenida por la demora del ciclo les sometieron a una angustiosa espera para culminar con un desarrollo fenólico completo. Al fin se llegó a la esencia madura de un fruto nítido y fragante, conservado durante un estío luminoso y fresco. Sustancia en la frescura.
Se seleccionaron diferentes parcelas del municipio de Gratallops. Ensamblaje de 30% cabernet sauvignon de coster de la Gran Finca de l’Ermita, 60% garnacha vieja de la finca La Capella y 10% cariñena vieja de la finca Coll del Corral. Las uvas fermentaron en pequeñas tinas de roble con bazuqueos, en las que permanecieron en maceración durante 41 días. Se crió durante 18 meses en barrica nueva de roble francés con trasiegos cada 3 meses.
Álvaro Palacios 2007 es una película refinada que discurre por algunos parajes mágicos de Gratallops. Discreto al principio. Se abre después de 4 o 5 horas de decantación. Textura fina y sutil, con una fluidez y frescor magníficos. Rehúye del impacto. Una gran botella a disfrutar dentro de 15-20 años.
