Bordeaux 2017 por Château Lafleur
El invierno empezó seco, y febrero y marzo fueron normales.
La brotación fue precoz, y un abril seco y cálido finalizó con dos noches de heladas, los días 27 y 28. Dos historias bien diferentes tomaban forma.
En Lafleur, gracias a la movilización de todo el equipo durante esas dos noches, conseguimos proteger del hielo la totalidad de esta prometedora añada.
Mayo fue como de costumbre; junio, excesivamente cálido y seco hasta el día 22. El estrés hídrico estaba alcanzado su paroxismo. Esta situación se desbloqueó los últimos diez días de junio, con 100 mm de lluvia que fueron realmente bienvenidos.
La viña se daba un respiro y nosotros nos aliviábamos.
En julio y agosto, con solo 35 mm de lluvia en dos meses, volvió la sequía; afortunadamente, asociada a temperaturas habituales para la época.
El ciclo vegetativo en esta añada tan variopinta terminó con un mes de septiembre muy equilibrado que permitió conseguir una buena madurez de los taninos, conservando a la vez toda la frescura de la fruta.
2017 representa en Lafleur la continuidad de las añadas 2015 y 2016. Además, los rendimientos obtenidos, bastante habituales, demuestran lo certero de nuestras decisiones vitícolas. Todas nuestras cepas han alcanzado, una vez más, un equilibrio casi perfecto.
Grand Village sí fue, en cambio, un viñedo azotado por la helada, y sus heridas nos acompañaron durante toda esta campaña. Nos adaptamos. Estimulamos y podamos una gran cantidad de cepas para recuperarlas, desplegando al máximo el colosal esfuerzo que nos permitió obtener una pequeña cosecha que nos llena de orgullo presentar.
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