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2012 fue un año muy seco, con muy poca lluvia durante el invierno y la primavera. Como consecuencia, la brotación fue 15 días más tarde que en el año anterior y todo el ciclo se vio retrasado. En verano no hacía calor y las noches eran más frías de lo normal, en las 2 últimas semanas de agosto. Los rendimientos fueron inferiores debido a la falta de agua en el suelo y la lluvia durante la floración, hizo que las uvas fueran entre un 20% y un 30% más pequeñas que las del año 2011. Empezamos la vendimia a principios de septiembre. En las viñas viejas la maduración fue equilibrada, obteniéndose unas uvas con un buen contenido de azúcar y un alto valor de ácido málico, dando un buen nivel de pH en el vino. Sin embargo, la acidez total fue menor que en el año anterior. En cuanto a los vinos, los tintos presentan muy buenos colores, buena concentración, equilibrio y una buena frescura. Los blancos tienen una buena acidez y un contenido de alcohol inferior.

Los vinos de Dirk Van Der Niepoort en el Douro de la cosecha 2012 aquí.