Toscana y Sicilia 2019 por Andrea Franchetti
Tenuta di Trinoro 2019
2019: la cosecha de maduración más tardía de los últimos 10 años
La primavera fue fría, con un mes de mayo que apenas existió. El 7 de mayo hubo una helada que nos obligó a pasar toda la noche prendiendo más de 9.000 antorchas en nuestros viñedos plantados a menor altitud, para evitar daños durante la floración. A todo esto, le siguió un prolongado período de frío que retrasó la floración, especialmente para la sémillon blanc y la merlot. Obtuvimos unos racimos sueltos, bayas pequeñas y pieles gruesas.
La mayor parte del mes de agosto tuvimos unas temperaturas tan elevadas que las plantas se “desactivaron” (pararon su ciclo vegetativo), estaban ya muy agotadas tras la extraordinaria cosecha del año anterior. A esto le siguió otro descenso de la temperatura a finales de mes, que paralizó la maduración de todas las cepas, especialmente para la cabernet sauvignon y el petit verdot, que tienen una maduración tardía. 2019 fue la cosecha con la maduración más tardía que hemos visto en los últimos diez años. Empezamos la vendimia el 14 de septiembre con la sémillon, de la que realizamos entre 2 y 3 pasadas, y cosechando una primera pequeña cantidad de merlot de las laderas, con media vendimia entrando en bodega alrededor del día 10. El período de espera entre la merlot y la cabernet franc este año fue muy corto, con la cabernet franc entrando mayoritariamente el día 18. Incluso, teniendo un inicio de octubre lluvioso y fresco, nos impresionó la calidad y la cantidad: 5 o 6 excelentes parcelas de merlot, lo mismo para la cabernet franc, gracias a unos racimos más pequeños y compactos, con menos bayas, y en esta cosecha dejando más racimos sin vendimiar en las cepas.

La cabernet sauvignon y la petit verdot en cambio encontraron un otoño más cálido de lo habitual –llevamos manga corta hasta la última semana de octubre– y las uvas se vendimiaron los días 23 y 24. Las frías temperaturas del mes de mayo, y también de finales de agosto, tuvieron una profunda influencia en los vinos, dejando en ellos una huella de frescor a pesar del constante calor del verano y del otoño. Ahora, los vinos son menos densos de lo habitual, dado el estrés de las plantas durante la maduración. Solo esperamos que expresen su máximo esplendor en la barrica.
Vídeo de la vendimia Tenuta di Trinoro 2019Franchetti 2019

La temporada fue excelente, con unos suelos húmedos, gracias a una buena cantidad de lluvia al principio del periodo de brotación, y posteriormente al principio de la floración, en primavera. Las olas de calor del verano fueron suaves para el cultivo de las uvas tintas, cesanese y petit verdot, destinadas a nuestro vino Franchetti (ensamblaje con una proporción 50-50 de las dos variedades este año). Solo hacia el final vimos cansancio con una parada antes de la maduración final en la petit verdot, pero creemos que este ligero retraso nos fue bien para el vino con unos aromas intensos en la variedad cesanese, juntamente con nuestra espera de varias noches frías y suaves a finales de octubre, a 1.000 metros en la vertiente norte del Monte Etna.