Raíz
La bodega en Toro de Marcos y Miguel Eguren está, desde su primera añada, en el podio de la denominación. La gama es tan impresionante que, desde su Almirez –que es una de las joyas de la añada– a su exclusivo Teso La Monja, cada vino sobrepasa lo que se espera en su segmento. Los meses de diciembre, enero y febrero se caracterizaron por la sequía, con bajas temperaturas y hielo que secaba el suelo, seguidos de algunas precipitaciones en marzo y abril. Las altas temperaturas del mes de mayo provocaron un crecimiento vegetativo muy fuerte, que hizo necesaria una poda en verde. Las precipitaciones acumuladas en Toro hasta la floración fueron de 137 mm, de las más escasas registradas en años. En verano se produjeron sucesivas olas de calor. Del 11 al 24 de julio se dieron temperaturas máximas de más de 40 ºC y mínimas que superaron los 22 ºC. En agosto, se apreciaron síntomas de sequía en el viñedo, con diferencias importantes en función de los suelos, siendo los arenosos-pedregosos los que resistieron mejor. A partir de la primera semana de agosto bajaron las temperaturas, en torno a 8 ºC, tanto las máximas como las mínimas, siendo muy favorables para el óptimo desarrollo del envero. La última semana de agosto se registraron precipitaciones de entre 12 y 20 mm, dependiendo de las zonas, que ralentizaron la madurez fisiológica y mejoraron la fenólica. La vendimia se inició el 9 de septiembre y se extendió hasta el 27 de septiembre de 2022. Fue una vendimia larga, en la que se alternaron días de frío y días de calor, junto con unas ligeras precipitaciones registradas la segunda semana de septiembre, que obligaron a medir muy cuidadosamente la expresión de cada parcela, siendo muy rigurosos y selectivos en la recogida del fruto y revisando las parcelas diariamente.